Textos terapéuticos

He descubierto que cuanto más escribo más me conozco, más me libero de malos días.
Entre mis cosas encontré un texto, cuando lo leí estallé en ira, en cólera, pero entendí que tenía que vivir esa situación para poder entender que no podía andar por la vida tratando de ser fortaleza forrada en acero, descubrí que mi corazón moría cada vez que decía "no voy a involucrarlo, él no tiene que participar en esto", descubrí que los sentimientos no saben jugar, que ellos toman muy en serio las cosas de dos .
Cuando estaba harta de ser Cin, pero ahora me alegra saber que no deje que Cin se desvaneciera, y que me ayudaron a recuperarla.

Una noche me disfracé de la persona que no soy, seguí cada paso como normalmente no lo haría, me acerque a la persona que en un tiempo desprecie, pero acogí de nuevo... Me engañe a mi misma haciéndome creer que lo soportaría, dejaría las emociones de lado y actuaría como la mujer sin remordimientos, sin escrúpulos, que solo sería una noche, nada más, solo sería una aventura, olvidaría o lo seguiría manteniendo... Pero caí en mi realidad, no suelo ser así, no puedo ignorar a la persona que he formado, no puedo pasar por encima de mis emociones e ignorar mis sentimientos... Soy mujer y valiosa, y por que entregarme tan dócilmente a quien no lo valora, a quien solo espera placer, quien solo me ve como un cuerpo de buen caminar, una linda cara, pero no ve quien realmente soy. A quién quería engañar...?Pero de que vale ahora decir, maldecir, reclamar, si ya lo hice, ya di el paso... No hay vuelta atrás...

Un día fui así, me negué a mi misma, las mascaras eran mis amigas, los disfraces cubrían los fríos, pero eran incapaces de calentar mi alma.
Hoy miro hacia atrás, no hay rastros, todo se ha ido, respiro hondo porque ya nada es lo que era.
Soy feliz porque puedo escribir acerca mi pasado y mis resentimientos han muerto, tengo una terapia definida en palabras, sílabas, frases, escribir es mi terapia.